Es un compuesto en el que una molécula orgánica (agente quelante) rodea y se enlaza a ion metálico protegiéndolo y evitando reacciones indeseadas con el medio externo.
La quelatación protege al nutriente de la formación de compuestos insolubles, tanto en el caldo de aplicación como en contacto con el suelo. Así, la eficiencia de absorción es cercana al 100%.